Después de más de 10 años de conversaciones y varios proyectos presentados, llegó el momento que los hermanos Isaac y Emma Guillen dirán el gran paso de reformar su comercio en post de buscar el equilibrio y la practicidad comercial, que hasta la fecha desarrollaban a espaldas del público.

Se buscó encontrar la máxima orientación hacia la calle para que la familia Guillen, con una gran tradición familiar en el sector cárnico, tuviera la mayor visibilidad para la venta de sus propios productos.

En Guillen Alimentación disponen de una vitrina frigorífica de 10 m con cristales rectos de apertura fronto-lateral, armario frigorífico madurador y cava frigorífica de quesos, equipada toda la maquinaria con materiales de alta calidad y última tecnología de frio.

No debemos olvidar el obrador/cocina a la vista de todo aquel que accede a comprar a la tienda, fidelizando clientela al comprobar que los productos adquiridos son los cocinados antes sus ojos.

En este proyecto se desarrollaron trabajos de montaje de instalaciones frigoríficas (centrales) a la intemperie para evitar olores y ruidos dentro del establecimiento y así crear un ambiente agradable de compra.